El tremendo accidente protagonizado este jueves a la tarde por un auto que se incrustó bajo un camión que estaba detenido en la banquina, a la altura del puente de la avenida De los Lagos, sobre la mano a Capital de la Panamericana, dejó, además de esa imagen estremecedora y el saldo de dos heridos graves, otra secuencia preocupante que dio la vuelta al país y provocó estupor. Gabriel Alejandro Grecco es uno de los socorristas de Defensa Civil de Escobar que participaba de las tareas de rescate para retirar a los dos ocupantes del Fiat Mobi que habían quedado atrapados bajo el acoplado del camión. En un momento, a causa del gran peso del transporte -42 toneladas- un taco de madera que formaba parte del equipo llamado minicojín - un artefacto que se utiliza para levantar cuerpos pesados- se desprendió y golpeó violentamente en la cara de Grecco, quien se desplomó, golpeó la cabeza contra el pavimento y perdió la conciencia durante unos segundos. El expansor es un dispositivo diseñado justamente para este tipo de emergencias. Sirve para rescatar a personas atrapadas entre escombros o estructuras, similares a colchones inflables. En este caso, no explotó, pero cedió de manera repentina, hiriendo a quien lo manipulaba. De inmediato, una ambulancia del SAME trasladó al agente de Defensa Civil a la Unidad de Diagnóstico Precoz de Garín, donde recibió los primeros auxilios. Más tarde lo llevaron a la recientemente inaugurada clínica de alta complejidad Manuel Belgrano, perteneciente a IOMA, en Ingeniero Maschwitz.