El Municipio decomisó la mercadería de vendedores ambulantes que ofrecían diversos productos en la calle.

Allí, con la presencia de tres móviles de la Guardia Urbana, se les secuestró la mercadería a jóvenes que vendían guantes, medias y desodorante para pisos concentrado.

Las acciones habrían comenzado a partir de una denuncia realizada por un vecino (se estima que comerciante de la zona) a la policía. Luego, desde la comisaría Pilar 1º se solicitó al Municipio la presencia de inspectores para poder concretar el decomiso de la mercadería. Luego de labrar las actas correspondientes, la causa fue derivada al Juzgado de Faltas.

De acuerdo a lo expresado  por el jefe de Gabinete, Juan Pablo Martignone, desde el Estado “vamos haciendo operativos en algunos sectores y localidades, pero también actuamos cuando hay denuncias puntuales o pedidos especiales, como el de la comisaría en este caso. No fue un operativo especial y no se inició en el Municipio”.

Luego de indicar que la presencia de las tres patrullas “fue una decisión policial”, el funcionario reconoció que a la hora de actuar en situaciones de esta índole “hay un equilibrio muy complicado. En muchos casos es cierto que para los vendedores ambulantes es una forma de sustento, hay que tener mucho cuidado”.

En este sentido, “dependiendo del contexto, el Municipio va manteniendo este equilibrio, para defender fuentes de trabajo de gente que tiene a la venta ambulante como único sustento de vida, sin perjudicar al comercio”.